Los
seres humanos también somos animales y a pesar de que ciertas especies tienen
diversas similitudes con la nuestra, actividades básicas como comer, dormir,
reproducirnos o luchar o defendernos, las realizamos tanto el hombre como un
animal. Esto quiere decir que tenemos las mismas necesidades básicas, sin
embargo, cabe resaltar que el ser humano puede decidir tener relaciones
sexuales solo por placer con las medidas necesarias y no siempre con el
propósito de reproducción.
Una
diferencia muy importante es que tenemos la capacidad de reflexión, otra
diferencia consiste en que podemos resolver problemas del día a día esto lo
podemos hacer gracias a nuestra experiencia o aprendizaje. Podemos organizar
información y hacer nuevos descubrimientos, hemos podido crear diversas formas
de comunicación, por supuesto más complejas que las del reino animal.
El
ser humano a diferencia de los animales puede vivir emociones como el amor, la
felicidad, la ira, la tristeza, el coraje, etcétera.
Por
otro lado, ¿Cuáles serían las diferencias del ser humano con las plantas? La
respuesta es más sencilla, los animales tienen cierta inteligencia mientras que
las plantas no, pero a pesar de ello son elementos necesarios para el
desarrollo del ser humano.